Madrid, 26 may (EFE).- El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (PP), asegura que trabajará «conjuntamente» con los hosteleros para reformar la ordenanza de terrazas, de modo que se pueda mantener el apoyo a estos espacios una vez expiren las medidas extraordinarias adoptadas con motivo de la pandemia.
«Somos conscientes de que la situación económica que hay en estos momentos exige que podamos seguir ayudándoles y echándoles una mano«, ha declarado Almeida a los medios antes del acudir a la presentación del informe anual de la Fundacion Cotec en La Nave de Villaverde.
Precisamente este miércoles por la mañana Almeida se ha reunido con representantes de la Asociación Empresarial de Hostelería de la Comunidad de Madrid, la Asociación Madrileña de Empresas de Restauración (AMER), Hostelería Madrid y el Gremio de Hosteleros Plaza Mayor.
Y les ha trasladado, ha dicho, «un mensaje de apoyo» y su voluntad de mejorar «la convivencia entre los vecinos y las terrazas» creando a la vez «un marco jurídico de estabilidad».
«Los hosteleros nos han garantizado que, obviamente, ellos también van a hacer todos los esfuerzos que sean necesarios para poder garantizar esa convivencia vecinal«, ha aseverado el alcalde, quien ha prometido «empezar a trabajar de inmediato» con el sector «en la modificación de esa ordenanza».
Las medidas extraordinarias de apoyo a la instalación de terrazas adoptadas por el Ayuntamiento de Madrid están prorrogadas hasta el 31 de diciembre, siendo las principales la exención del pago de la tasa de ocupación del espacio público y el permiso para colocarse sobre bandas de aparcamiento y zonas terrizas.
El delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante (PP), anunció la semana pasada que las terrazas instaladas sobre plazas de aparcamiento se revertirían en 2022, aunque luego Almeida supeditó la expiración de esta y las demás medidas a la evaluación de la pandemia.
Una postura chocante con la de la vicealcaldesa, Begoña Villacís (Cs), que este miércoles ha vuelto a insistir en que se mantengan todas esas terrazas porque «el 31 de diciembre no nos vamos a poder permitir perder más de 2.000 puestos de trabajo».
En declaraciones a los medios tras presentar la publicación Madrid en Cifras, Villacís ha alegado que, si bien «hay zonas tensionadas» y los vecinos «tienen su derecho al descanso», el Ayuntamiento debe tener «prioridades» y no permitirse «el lujo de perder empleo«.
A juicio de la vicealcaldesa «hay margen de negociación», puesto que los hosteleros «están ofreciendo pagar una tasa de terraza ampliada«, y ha planteado otras ideas como «negociar la hora de cierre» o «multar a aquellos que incumplan».
«Lo que habrá que hacer es regularlo, mejor hablar con los hosteleros, ellos están dispuestos a negociar porque les va la vida en ello», ha apuntado Villacís, quien ha zanjado: «El alcalde y yo siempre llegamos a un acuerdo». EFE