Madrid, 16 feb (EFE).- El consejero de Presidencia, Justicia e Interior madrileño, Enrique López, se ha comprometido este martes con los representantes del sector del ocio nocturno a «actualizar» el decreto que regula a los controladores de entrada a los centros de ocio nocturno, que data del año 2008, para ofrecer garantías y seguridad jurídica tanto a los locales como a los porteros de discoteca.
López se ha reunido este martes con los representantes del Círculo de Empresarios de Ocio Nocturno (Ceonm) y la Asociación Empresarial de Ocio Nocturno Noche Madrid, para analizar los hechos ocurridos en los últimos días y las medidas que se han adoptado, tras el primer fin de semana de febrero, en el que dos jóvenes murieron y otros tres resultaron heridos de gravedad en reyertas entre bandas latinas.
«Hemos coincidido en que el plan desarrollado por la Delegación del Gobierno en Madrid que le pedimos desde la Comunidad de Madrid es un plan adecuado porque pone el foco del problema donde está, que es en la actividad criminal del elemento organizado a través de las bandas juveniles, y no de la actividad del ocio nocturno, que es una actividad económica importante y que no está generando ningún tipo de peligrosidad», ha dicho el consejero.
López ha felicitado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por el trabajo que han realizado el pasado fin de semana y se ha mostrado convencido de que el plan de controles policiales en las zonas de ocio contribuirá a mantener la seguridad en la ciudad y la región.
«Tenemos que seguir trabajando, a través de la inteligencia policial para ir desactivando esas bandas juveniles», ha afirmado el consejero, quien ha insistido en «diferenciar la actividad de las bandas juveniles de la actividad del ocio nocturno» y ha lanzado «un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía madrileña y a los jóvenes para que sigan socializando con libertad, con responsabilidad y con seguridad».
El consejero ha precisado que se trata de bandas juveniles que se autodenominan bandas latinas porque evocan las maras que existen en otros países como Guatemala, pero ha apostado por «desterrar el elemento de extranjería en el tratamiento de este tipo de delincuencia», al considerar que no importa que sean españoles o extranjeros, sino que hay que perseguir la delincuencia al margen de cualquier otra circunstancia.
Vicente Pizcueta, de la Plataforma por el Ocio, ha reconocido «la capacidad de reacción inmediata» que han demostrado las Administraciones, después de un hecho «tan trágico» como el de hace ahora diez días que ha permitido coordinar las actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, de la Policía Nacional, de la Policía Local y de la Comunidad de Madrid, para proteger «la imagen de marca» y «la proyección internacional» de Madrid como región «segura».
Pizcueta es partidario de mantener el dispositivo especial durante varios meses para lanzar un mensaje «tolerancia cero» a la delincuencia juvenil organizada y se ha mostrado convencido de que este despliegue contribuirá a la recuperación de la actividad económica en la desescalada de la covid-19.
El presidente de Ceonm, Tito Pajares, ha agradecido la disposición del consejero a actualizar las funciones de los controladores de acceso a los establecimientos de ocio y actividades recreativas, espectáculos públicos y festivales culturales y deportivos.
En 2008, ha indicado, la Comunidad de Madrid fue «pionera» en regular esta figura profesional, que requiere un carné profesional y formación en seguridad, primeros auxilios o psicología, y que ahora se pretende que colabore con los empresarios de ocio nocturno en labores de información en cuanto detecten un incremento de actuaciones delictivas.
Ha reclamado a la Delegación del Gobierno un mayor número de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y ha exigido el mantenimiento ‘sine die’ del dispositivo especial de agentes policiales para hacer controles preventivos en las zonas de ocio.
El pasado fin de semana, ha apuntado, se ha notado una reducción de los aforos de las sesiones de los más jóvenes por el temor que suscitaron los mensajes que transmitieron en las redes sociales por amenazas en distintos parques, algo que no se dio en las sesiones de adultos. EFE