EFE.- El Tribunal Superior de Londres dictó este jueves que el rey español emérito, Juan Carlos I, no tiene inmunidad legal en Inglaterra tras su abdicación, y por tanto procede la demanda por acoso interpuesta en su contra por su examante Corinna zu Sayn-Wittgenstein.
El juez Matthew Nicklin debía decidir si el anterior monarca puede ser juzgado en la jurisdicción inglesa, antes de evaluar la demanda de Sayn-Wittgenstein, que lo acusa de acoso, seguimiento ilegal y difamación desde la ruptura en 2012 de su relación, que entablaron en 2004.
Corinna Larsen demandó a finales del 2020 al rey emérito ante el Tribunal Suprior de Londres y solicitó, además de ser indemnizada por la «vigilancia ilegal» que sufrió de los servicios secretos españoles, que el ex jefe del Estado no se pudiera acercar a 150 metros de ninguna de sus residencias.
En la denuncia, que se conoció el pasado julio, la empresaria acusó al Juan Carlos de Borbón y a los servicios secretos españoles de «vigilancia ilegal» en el Reino Unido y de hostigarla desde 2012 mediante amenazas, difamación y espionaje encubierto.
Tras su ruptura sentimental, segun Corinna, siguieron siendo amigos durante un tiempo, antes de que Juan Carlos buscara reavivar su relación.
Cuando la empresaria «manifestó claramente su negativa», el ya rey emérito de 84 años adoptó «comportamientos de acoso», dice, acusándola de haber «organizado» una serie de actos maliciosos, causándole «angustia y ansiedad».
«La sentencia de hoy demuestra que este acusado no puede esconderse detrás de ningún cargo, poder o privilegio para evitar este procedimiento», reaccionó Robin Rathmell, abogado de Corinna.
«Este es el primer paso en el camino hacia la justicia; los terribles hechos de este caso finalmente serán llevados ante la justicia», agregó en un comunicado citado por la agencia France Press.