EFE.- Frank James, el sospechoso de haber llevado a cabo ayer el ataque en el metro de Nueva York, telefoneó él mismo a la Policía para comunicar su ubicación a las fuerzas del orden, que llevaban más de 24 horas buscándolo.
Según afirman varios medios locales, el propio James llamó a la línea telefónica que utiliza la Policía para recibir pistas de los ciudadanos, e informó que se encontraba en un establecimiento de McDonald’s en el bullicioso barrio de Lower East, en Manhattan.
«Soy Frank. Me estás buscando… mi teléfono está a punto de morir (quedarse sin batería)», dijo el autor de la llamada a la Policía, según indica la cadena local NBC New York.
Frank James era buscado por autoridades estadounidenses tras el ataque en la estación «36 Street» en Brooklyn, donde se presume activó granadas de humo antes de abrir fuego contra los pasajeros en un vagón del metro.
James dejó 10 heridos de bala tras lanzar dos bombas de humo y comenzar a disparar contra los ocupantes de un tren de la línea N en Brooklyn a las 8.30 de la mañana, en plena hora punta, mientras que otras 13 personas tuvieron que ser atendidas por distintas lesiones provocadas durante el suceso.
Tras su detención, el sospechoso del tiroteo será acusado de «ataque terrorista».